“Los Challenger, una muy buena oportunidad para quienes ‘vamos empezando’”, según el jugador norteamericano Ionian Carballo

02/01/2022

Ionian Carballo, único jugador norteamericano que lucha por hacerse un hueco en World Padel Tour, ha sumado en 2021 y en el Albacete Challenger los primeros 3 puntos que le sitúan en el puesto 585 del ranking del circuito profesional

Ionian Carballo nació hace veintiún años en Ciudad Madero, una localidad costera del golfo de México, al sureste del estado de Tamaulipas. Con 13 años, comenzó a jugar al pádel de la mano del entrenador argentino Claudio Andrés Trevisán en The Woodlands, a las afueras de Houston, en el estado estadounidense de Texas, donde reside su familia. 

Llegó a España en 2017 para preparar su participación en el mundial de menores representando a EE UU y, desde 2018, se afincó en Málaga, donde estudia y entrena.

Jugador habitual en el circuito andaluz de pádel, tan sólo ha jugado 12 partidos en World Padel Tour desde el 2017. Este ya pasado 2021 y gracias a su participación en dos de los seis Challenger de la temporada ha ganado su primer partido y sumado sus 3 primeros puntos en el circuito profesional, concretamente, en el Albacete Challenger.   

Como él mismo reconoce no ha jugado ni tantos torneos ni tan seguido como le hubiera gustado. En ocasiones, sus estudios universitarios y, en otras, los puntos de corte estipulados por World Padel Tour para entrar en competición no se lo han permitido. “Los Challenger, sin embargo, me dan la oportunidad de jugar con más frecuencia y tratar de sumar más puntos a mí y a un buen puñado de jugadores que venimos de abajo y que muy pocas veces llegamos a superar el corte”, asegura.  

Según tu ficha World Padel Tour, eres el único jugador de ‘nacionalidad’ estadounidense que ha tomado parte en 2021 en los renovados Challenger. ¿Cómo un chico de apenas 20 años nacido en México D.F. y residente en Houston, Texas, acaba jugando este año los La Nucía y Albacete Challenger?

IONIAN CARBALLO (I. C.). De todos/as es sabido que, en este momento, el nivel más alto y competitivo de pádel se da en Europa, especialmente en España. Y yo, siendo un jugador nacido en Ciudad Madero (Tamaulipas, México) y viviendo en Estados Unidos, decidí que quería más y que necesitaba más para seguir mejorando. 

Así fue cómo mi familia hizo un gran esfuerzo para poder mandarme a España y poder conseguir mejorar. Y por esta misma razón, llegué a Málaga, a la que se ha convertido en mi nueva casa. 

Ya, estando en España, he tratado de jugar todos los torneos posibles, en este caso, también, los La Nucia y Albacete Challenger.

Tus dos últimos compañeros Hugo Lorenzo y Elías Pérez son malagueños, ¿tu ‘conexión’ al pádel pasa por Málaga?

I. C. Sí. Como mencioné anteriormente, resido y entreno en Málaga desde octubre 2018. 

Sin embargo, mis principios en España fueron en 2017, a donde llegué para prepararme para el mundial de pádel de menores representando a Estados Unidos. 

Tanto Hugo Lorenzo como Elías Pérez son alumnos de Pancho Collado, uno de mis entrenadores. Además, Hugo y Elías son de los pocos compañeros y amigos que me ha brindado el pádel malagueño.

Desde 2017, llevas disputados tan sólo 12 partidos World Padel Tour, 4 este último año, ¿a qué se debe tu escasa participación?

I. C. Sí, llevo jugando pruebas World Padel Tour desde el 2017. Sin embargo, no he jugado tantos torneos ni tan seguido como me hubiera gustado. De hecho, este año sólo participé en 4 pruebas. 

Esto se debe a dos cosas. Primero, a la universidad. Estando ya en la universidad me resulta complicado compaginar mis estudios con los torneos, más que nada, porque mis partidos son, normalmente, entre semana. 

Y segundo, por el tema de los puntos. Hoy en día, una gran número de las parejas que se apuntan a las pruebas acumulan un número importante de puntos, haciendo que un buen puñado de jugadores que venimos de abajo no lleguemos nunca a superar el corte. 

De ahí mis dos participaciones en los Challenger, ya que estos torneos me dan la oportunidad de jugar con más frecuencia y tratar de sumar más puntos. 

Empezaste a competir en el circuito con 16 años, pero ¿a qué edad comenzaste a jugar al pádel?

I. C. Comencé a jugar a los 13 años, es decir, tres años antes de mi debut en World Padel Tour.

Dónde te iniciaste, ¿en México? ¿En EE UU?

I. C. Empecé a jugar al pádel en The Woodlands (Texas), a las afueras de Houston. En un club que ahora se llama The Grand Sports Club. Y con un entrenador argentino, Claudio Andrés Trevisán, al que le tengo que dar las gracias por todo lo que me ayudó y enseñó.  

Y lo de jugar al pádel, ¿de dónde te viene? ¿De tu padre, de tu madre, de un amigo o amiga…?

I. C. Al pádel llegué por mi madre. Yo jugaba a fútbol a nivel competitivo y, un día, pusieron una pista de pádel donde entrenaba. En una ocasión, invitaron a mi madre para probar el pádel y ya no paró. Le gustó tanto que se hizo socia del The Grand Sports Club (TGSC) y empezó a jugar de seguido cada semana. 

Un verano y nada más salir de la escuela, no tenía nada que hacer así que la acompañé al club. Fue entonces cuando conocí a Claudio, quien me invitó a probar y a jugar al pádel, entre otras razones, porque estaban buscando a menores para formar parte del equipo nacional de la categoría. 

Esos fueron mis comienzos.

¿Cómo es tu día a día por lo que al pádel se refiere? ¿Cuántas horas entrenas a la semana?

I. C. Por las mañana, voy a la universidad. Y, por las tardes, entreno 1 o 2 horas de lunes a jueves. Es decir, aproximadamente entre 4 y 8 horas a la semana, dependiendo de la semana, claro.

¿Quién es tu entrenador?

I. C. Mi equipo está formado por 2 entrenadores, Francisco Tobaria y José Antonio Jiménez, y un preparador físico Antonio Portillo.

Eres un jugador de revés, ¿te gusta llevar la manija de la pareja?

I. C. Por una parte, sí. Como jugador de revés, me gusta que, en ocasiones, me toca acceder a la situación dada y adaptarme para poder sacar la mejor versión de la pareja.

¿Cuáles son tus mejores golpes? ¿Y los aspectos del juego que más tienes que trabajar en los entrenamientos?

I. C. Creo que mis mejores golpes son la volea de revés y el remate. 

Y los aspectos que más tengo que mejorar durante el partido, sin lugar a dudas, la defensa y la mentalidad, pero bueno, estoy en ello, intentando trabajarlos día a día.

¿Quién es o quiénes son tus jugadores favoritos del panorama actual? ¿Qué es lo que más te gusta de ellos?

I. C. Creo que ésta es la pregunta que le hacen a todo jugador en algún momento de su vida deportiva. Mis favoritos de siempre son dos jugadores: el primero, Sanyo Gutiérrez; y el segundo, Maxi Sánchez. 

Cuando empecé a jugar, me fijaba mucho en ellos, por la compenetración y la química que tenían en la pista. Fueron mi referencia de cómo debe de ser un jugador y cuál debe ser el ‘roll’ de los miembros de una pareja. 

A día de hoy y aunque ya no jueguen juntos, estoy al tanto de sus partidos.

¿Te gustaría dedicarte profesionalmente al deporte de la pala?

I. C. No del todo. A mí me gustaría dedicarme al negocio del pádel, y a la representación y promoción de jugadores. 

Sin embargo, seguiré entrenando e intentando mejorar. Y si se da el caso de que tenga nivel como para seguir compitiendo profesionalmente, lo haré sin duda alguna. 

Vayamos poco a poco entonces, después de sumar tus 3 primeros puntos en el Albacete Challenger y alcanzar el puesto 585 del ranking World Padel Tour, ¿cuáles son tus metas para el 2022 por lo que al pádel se refiere?

I. C. Como tu bien dices, poco a poco. 

En cuanto al circuito profesional, mi meta para el 2022 sería conseguir sacar mi mejor nivel y avanzar lo más que pueda en el ranking.  

Y por lo que se refiere al circuito andaluz, me gustaría subir al ‘top 10’ de su ranking absoluto. Actualmente, estoy situado en la posición 17.

¿Tomarás parte en los Challenger?

I. C. Sin lugar a dudas. Los Challenger son una muy buena oportunidad, no solo para mí, sino también para el resto de jugadores que ‘vamos empezando’. 

¿Qué aspectos positivos ves en los Challenger?

I. C. Desde mi punto de vista, los Challenger tienen bastantes aspectos positivos. 

Por ejemplo, estos torneos nos permiten competir entre jugadores con pocos puntos ranking, sumar experiencia y luchar por hacernos un hueco en el circuito profesional. 

Y, además, con los puntos que poco a poco vamos sumando en las citas Challenger, ese sueño se vuelve cada vez más alcanzable. 

Compartir

Compartir

Suscríbete a nuestras noticias

¿Quieres recibir todas nuestras noticias sin excepción?

Únete a la comunidad WPT Challenger y estarás al día de lo que se cuece en la pista y en sus alrededores.

Ultimate Padel Company, SL (UPC) es la Responsable del tratamiento de tus datos, con la finalidad de gestionar tu inclusión en la comunidad WPT Challenger y de remitirte comunicaciones con novedades, promociones y nuevos servicios. Tienes derecho de acceso, rectificación, supresión, limitación, oposición al tratamiento y portabilidad. Puedes ejercitar tus derechos en challenger@wptchallenger.com.  Más información en nuestra Política de Privacidad